A dormir al sofá

Nunca creí que esto llegaría a ocurrir. Jamás pensé que alguien me fuese a mandar "a dormir al sofá". Pero así ha sido... A día de hoy, he tenido que dormir ya dos noches en el sofá, y quién sabe si hoy a las dos de la mañana volverá a ocurrir lo mismo.
¿Que por qué? Porque desde que bajamos del armario la ropa de invierno, algo ha cambiado. Lo siento en el aire, lo siento en el agua, lo siento en la tierra... y sobre todo, lo siento en la piel.

Y es que algo me atormenta por las noches... Algo pequeño y rastrero que me está acribillando a picotazos ¬¬* Y a mí las picaduras se me convierten en ronchones, así que en pro de la Paz Mundial (porque una es una blandita y no quiero tener que ponerme borde) y de mi pobre piel, he decidido retirarme estratégicamente del campo de batalla -mi cama- hasta que el enemigo haya muerto de hambre y/o inanición.

Sé que me diréis "No huyas, atácale y líbrate de él". Lo he intentado, creedme. Pero, pese a las dos limpiezas generales de mi habitación, el culpable aún no ha aparecido. De hecho, no tengo ni idea de qué criatura me está chupando la sangre mientras duermo. Así que me limito a llamarle "El Bicho". Testigos presenciales (mi lagarto de peluche y mi lámpara de escritorio) han elaborado un retrato robot de la criatura... este es su posible aspecto:

Bichus antigoblinus tocahuevum. Más evolucionado que nunca. Más peligroso que nunca. Precaución, ciudadanos... Si le veis, disparad a matar.

Lo malo en sí no es dormir en el sofá... Lo malo es que hoy me he despertado con la espalda hecha polvo, porque ayer iba yo a dormir en el sofá grande, pero mi padre ya estaba durmiendo allí (en ese sofá se duerme mejor que en la cama, en serio xD)... Pero hoy pienso pelear para no dormir en el sofá pequeño. Espero que los ataques hayan cesado para cuando vuelva a escribiros. Y ya sabéis, "si no he vuelto en cinco minutos... esperadme un poco más".

Un abrachucho a todos ^^